OPINANDO

Para comenzar diré que la felicidad radica en la libertad de ser, hay que olvidarse de los complejos y vivir la experiencia, la familia, el amor y el matrimonio no es como se promociona en los cines ni como se pregona en el mercado, esto va más allá de lo que uno capta con sus 5 sentidos.
Cada quien tiene derecho a concebir la idea que quiera acerca de el objeto o a situación que quiera, pero tampoco hay que ser egoístas ante la percepción y deseos de los demás, cada ser tiene una necesidad, capacidad, y diversas cosas más, y debemos dejar que cada uno elija como vivir y afrontar lo que le ocurre en su vida.
Considero que no tenemos que ver sólo lo conflictivo que puede resultar algo, no tenemos porque recalcar sólo lo negativo que puede existir en alguien, también debemos mirar que el mundo y la vida no sólo se basa en desfases inútiles, y no se cuanta cosa más que opinamos o leemos a diario.
Más allá de en lo que nos concentramos o lo que apoyamos, ignoramos o rechazamos, cada instante y cada experiencia no sólo representa en si lo que ocurrió o lo que nos dejó en nuestra mente, sino que incluye más, es como algo que descifrar, e investigar, algo oculto o misterioso que la da sentido a nuestra existencia.
Lo bueno y lo malo esta esparcido entre todos, así seamos gays o no, tenemos que ser conscientes de ello, y dejar de comportarnos como si sólo la gente de un color o preferencia determinada supiera lo correcto y fuere perfecto, esto no funciona así aunque muchos quieran creer que es o dicen que debería de ser así.
Sea lo que uno sea, del color que sea, elija a la pareja que sea y tenga la edad o religión que tenga, creo que debe cuidar lo que dice y lo que vive, ante todo hay una crisis, un premio, un efecto negativo o bueno, ante esto y lo otro y todo lo aquello, hay que asumir una responsabilidad, ejercer una estrategia, así como crear y eliminar tantas cosas.
Tenemos todos que vivir y construir nuestra vida, y si no es que ayudar a los demás a alcanzar este fin mismo, entonces callarnos o voltearnos en vez de perjudicar la existencia de otros, lo más o lo mínimo esperado a veces es el respeto y la tolerancia, sino nos afectan, entonces no afectemos a los demás.