hay muchos factores que tomar en cuenta ....

“Ola” de muertes en los reclusorios

Lo extraño de los casos es que se cerraron rápido




En un hecho que para las autoridades estatales ha sido irrelevante, pero que ha despertado suspicacias, tres reclusos han fallecido en los penales locales en los últimos seis meses en extrañas circunstancias.

Además, un cuarto recluso acusado de homicidio —sin sentencia, pero confeso del crimen— presuntamente intentó suicidarse en el penal meridano, donde es sujeto a juicio por la muerte de su esposa.

Aunque las muertes en cárceles en Yucatán no son nuevas, han sucedido, en su mayoría, en celdas municipales, donde la vigilancia es insuficiente.

Estos casos ocurrieron en penales con vigilancia las 24 horas, lo que saca a relucir presuntas deficiencias en la administración de los centros penitenciarios yucatecos.

Llama la atención que dos de los muertos eran homicidas múltiples, además de que el tercero también purgaba condena —40 años— por delito grave, abusar de sus hijastras.

Los decesos ocurrieron en extrañas circunstancias y las autoridades rápido cerraron los casos. Oficialmente, dos de los reclusos se suicidaron y el tercero se cayó cuando se bañaba, lo que derivó en su muerte.

Un caso ocurrió en el penal de Ebtún y los otros dos en el reclusorio meridano de San José Tecoh, donde también se registró el intento de suicidio de otro interno acusado de homicidio.

Veteranos policías judiciales consultados señalaron que esta “ola de muertes“ en los penales es poco común, incluso no recuerdan tantas muertes en una sola administración gubernamental estatal.

El caso más extraño fue el 28 de agosto pasado, cuando en el penal meridano murió Mario Alberto Sulú Canché, asesino serial confeso, acusado de ultimar a tres jóvenes del interior del Estado. La muerte ocurrió en un baño de los separos del reclusorio, donde presuntamente se suicidó, luego de que antes declaró en el Juzgado 3o. Penal y sólo admitió uno de los tres crímenes que se le atribuyeron.

Además, en su declaración estuvo custodiado por tres guardias, es decir, tenía fuerte vigilancia y aun así se suicidó.— Carlos Gebhardt Acosta

COMENTARIO DE PATRICIA MAY EK:

YO NO SE SI ES LA CULPA DE LAS PERSONAS QUE LES LLEVA A NO DESEAR LA VIDA O ES LA COBARDIA POR ENFRENTAR SU CASTIGO, SEA CUAL FUERE LA RAZÓN DE ACUDIR A UN SUICIDIO, YO CONSIDERO QUE ES BUENO QUE EN LA CARCEL HAYAN PLATICAS CON LOS INTERNOS, QUE LOS ORIENTEN, QUE LOS HAGAN REFLEXIONAR, SUPONGO QUE HAYA TRABAJAN Y HACEN DIVERSAS ACTIVIDADES, PERO HAY QUE ENFOCARSE EN MUCHOS PUNTOS DE LA PERSONALIDAD, APESAR DE SER CRIMINALES TIENEN NECESIDADES, QUIZÁ UNA DE ESAS ES TENER UN POCO DE RESPETO Y COMPRENSIÓN, LA GENTE SE EQUIVOCA, A VECES DE MANERA HORRIBLE DAÑANDO A SU PROJIMO, PERO ANTE ESTO SE PUEDE TOMAR MUCHAS MEDIDAS, NO SÓLO EL CASTIGO DE ENCERRARLOS Y PERMITIR LOS ABUSOS ENTRE ELLOS, SINO TAMBIÉN SE LES DEBE ENSEÑAR VALORES, Y MOSTRARLES QUE LA VIDA NO SÓLO CONSISTE EN EQUIVOCARSE Y PAGAR POR LAS EQUIVOCACIONES.